En fin, a todo esto se le sumó la reparación de algún problema en alguna cañería, por calle Buenos Aires a la altura del 1100, sino calculo mal. La cosa va mal porque han cortado la vereda de una mano, está reducida la calzada por calle Mendoza, y la calle en sí está abierta como si tuvieran que hacerle cirugía a corazón abierto: zanjas profundas y estrechas acá y allá. A ciertas horas parece una película de zombies: sin gente, con autos estacionados en ambas veredas, a veces incluso a contramano, y todo lleno de tierra y con olor a podrido (un contenedor de basura quedó atrapado con su carga, el camión no puede pasar a retirarlo).
Entre todo esto, de pronto veo que el operado en cuestión tiene "costillas": debajo de la calle, justo abajo de una capa de cemento que sirve de base al asfalto, hay una serie de grandes vigas de madera, posiblemente durmientes. Y no son pocos: están a intervalos regulares, a veces rotos, a veces enteros (incluso vi un pedazo de uno, en la vereda, retirado por los obreros).
El otro día pude sacar estas fotos (perdón por aparecer en ellas, pero es que había tanto sol que ni siquiera veía la pantalla del celular). Me pregunto para qué serán. Supongo que tal vez para soportar el peso y evitar que el paso de los autos pueda compactar demasiado la tierra como para quebrar alguna cañería importante. En ese caso, me pregunto por qué se siguen usando durmientes de madera y no de concreto, mucho más económico y sustentable. O a lo mejor estos son viejos y los dejan porque de otra manera tendrían que rehacer TODA la calle.Como todo habitante de una ciudad grande en Argentina, tengo mis cuotas de pozos y reparaciones, y he visto un poco de todo. Pero es la primera vez que veo algo así, y me pregunto si otras calles tendrán lo mismo. Vaya uno a saber.

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